El Gobierno minimizó el impacto de la crisis económica internacional y aseguró que Bolivia será la menos afectada, porque no se integró totalmente al neoliberalismo, como lo hicieron otros países de Latinoamérica.
“Esa crisis se está manifestando en algunos países que han llevado esas políticas ortodoxas neoliberales en América Latina”, aseveró ayer a radio Erbol el ministro de Hacienda, Luis Arce.
“Yo veo algo muy positivo en la economía boliviana, porque los intentos de abrir la economía boliviana al mundo felizmente no han tenido éxito”, manifestó la autoridad en la entrevista.
Una muestra clara de esto es que el sistema financiero boliviano “no va a sufrir ningún efecto negativo pernicioso, no sólo porque los indicadores internos son buenos, sino porque la banca no tiene mucha relación con bancos internacionales, señaló Arce.
Según el Banco Mundial, la crisis económica afectará a todos los países latinoamericanos, pese a que están mejor dispuestos que en el pasado para soportarla. En Bolivia, los precios de los minerales como el zinc y el estaño ya comenzaron a golpear al sector minero del país.
Sin embargo, Arce afirmó que gracias a previsiones que tomó el Gobierno, el país sentirá menos el efecto de esta crisis.
En el tema de la alimentación, por ejemplo, el ministro aseveró que gracias a la ampliación de un 19% de las fronteras agrícolas, en Bolivia se están produciendo más productos como el arroz, la soya y el trigo, lo que permitirá que se importen menos de estos productos.
“Vamos a tener ambas cosas, una declinante inflación muy clara y, por otro lado, un incremento en la producción que nos va a hacer en algún momento autosuficientes”, sostuvo Arce.
El ministro Arce expresó que sobre los precios de minerales, la cotización del dólar y la caída del precio del petróleo son temas que deben tomarse con calma y explicó que cree que “en los medios de comunicación del mundo hay una exacerbación inusual sobre el tema de la crisis y esto hace que los precios de todos los productos en el mundo tengan una volatilidad extrema”.
Adelantó que por ahora no existen señales claras de “hacia dónde van las monedas, el precio del petróleo y de los commodities, como el trigo, el zinc el estaño no hay una dirección clara en este tema”, mencionó Arce.
También reconoció que sólo hasta el próximo año e incluso más se verán los frutos de la inversión en hidrocarburos.
“Esperamos que se vayan a notar el próximo año, porque así es, lamentablemente, hay un período de maduración y por supuesto el 2011 vamos a poder cumplir las metas de producción energética de gas y líquidos”, dijo.
Adelantó que el Ejecutivo tiene en marcha cuatro proyectos de electricidad para generación y aseguró que no sólo son para cubrir la demanda interna, sino también para exportación.
La posición del Banco Mundial es que la crisis afectará a la región por la disminución del crédito, la reducción de la demanda externa, que se traducirá en un aumento del desempleo, además en algunos países se sentirá el efecto de la caída de las remesas. Mientras los líderes del mundo piden reformas al sistema financiero y medidas urgentes ante el temor de una recesión mundial.
En el país cayeron los precios de los minerales, menos del oro. Los analistas aseguran que la recuperación del dólar y la baja de las cotizaciones de las materias primas son los factores que influyen en este bajón.
La crisis afectará al país por 4 temas, dice experto
El analista económico Gonzalo Chávez asegura que por lo menos cuatro factores afectarán a Bolivia en la crisis económica mundial: la caída de las remesas, el desempleo y las bajas en el precio del petróleo y en la cotización de los minerales.
“En el tema de la caída del zinc y la plata y el estaño ya nos está afectando, no hay que esperar nada”, aseveró el experto al ser consultado sobre la posición del gobierno de Evo Morales de minimizar el impacto del problema que se siente a nivel mundial.
Para Chávez, otro elemento que se sentirá tarde o temprano es la disminución de las remesas que envían los bolivianos que trabajan en el exterior y que el año pasado llegaron a los 900 millones de dólares, “pues ellos trabajan principalmente en el sector de la construcción, que es uno de los sectores más sensibles a la crisis económica y eso también nos va afectar”, sostuvo.
Otra amenaza para la economía boliviana es el precio del petróleo, por el que se generan los principales ingresos para el país. “Antes estábamos con un precio del petróleo de 148 dólares por barril y ahora estamos con 62 dolares, para eso no hay que ser economista, se ve que de 144 a 68 dólares tus ingresos van a bajar”, mencionó el analista.
A todo esto, también se suma la negativa para Bolivia de la ampliación de la Ley de Preferencias Arancelarias para los países andinos (ATPDEA) que impactará en el empleo del país.
“Hay que ser sereno, pero realista y sobre todo hay que tomar medidas para que la crisis sea menos dura de lo que podría ser”, recomendó Chávez ante la posición del Gobierno.
El experto en economía afirmó que el país tiene elementos con los que puede precautelar su economía ante el peligro de una recesión mundial, pues “tenemos con qué defendernos, tenemos las reservas internacionales, los bancos tienen reservas suficientes, el sistema financiero es sólido”, aseguró Chávez en su análisis. “La cosa no es decir aquí no va pasar nada, la idea es tomar medidas”, finalizó.
